Preparar la piel primavera

¿Ya tenéis ganas de que empiece la primavera? Después de un invierno atípico con grandes subidas y bajadas de las temperaturas, ya comienzan a notarse las ganas de la primavera. Preparar la piel es un proceso habitual en esta época del año antes de la llegada de la nueva estación. Para ello solo tenemos que adaptar nuestra rutina de belleza e incluir cosméticos para la hidratación y protección solar.

Con la primavera a punto de hacer su entrada triunfal en nuestro calendario, es momento para ti. Preparar la piel se convierte en un imprescindible antes de la llegada del verano. Para conseguirlo, desde Farmacia Dalí te explicamos lo necesario. ¡Apunta nuestros consejos!

Pautas para preparar la piel para el calor

Limpieza: el primer paso es llevar a cabo una limpieza profunda para eliminar el exceso de grasa, suciedad y residuos. Durante la primavera, la dermis se vuelve más grasa debido al aumento de la humedad. Preparar la piel significa usar un buen limpiador que elimine esas impurezas sin resecarla.

Exfoliación: junto a la limpieza, siempre debe estar la exfoliación. Una actuación para eliminar las células muertas de la piel y que se vuela más suave y radiante. Al pasar a la primavera debes llevar a cabo una exfoliación suave ya que una exfoliación excesiva puede irritar. Se recomienda hacerla una o dos veces por semana, dependiendo del tipo de piel.

Hidratación: si en invierno es importante la hidratación, en primavera la importancia también aumenta. Te aconsejamos usar una crema hidratante adecuada que tenga una textura más ligera. Así mantendrás la hidratación sin obstruir los poros. Para estos meses donde empieza el calor, te recomendamos tónicos faciales o aguas termales ya que refrescan mucho la piel.

Fotoprotección: sin duda, entre los cosméticos imprescindibles de esta época están los protectores solares. Los rayos solares se vuelven más intenso y necesita proteger la piel de la exposición constante. Se recomienda un uso diario con un factor de protección solar (FPS) de al menos 30. Evitarán las quemaduras solares y te protegerán del envejecimiento prematuro de la piel como manchas, arrugas, o flacidez.