Las buenas temperaturas dejadas por el verano, por fin han acabado. La llegada de la nueva estación se nota en los termómetros que son más propios de esta época. Los cambios sumados a la humedad y otros factores ambientales, pueden hacer que tu salud se vea afectada. Para cuidar la piel en otoño, tendrás que tener una rutina adecuada que te ayude a mantener su belleza y protegerla.
Si durante los meses de verano cuidamos la piel del sol, la arena de la playa, la sal del mar y el cloro de la piscina; ahora todo ha cambiado. Nuestra piel se enfrenta al frío y las bajas temperaturas cuidando nuestra piel más expuesta al exterior como el rostro y las manos. Si quieres unos consejos para saber mantener tu piel en otoño, desde Farmacia Dalí te explicamos cómo hacerlo.
Consejos para proteger tu piel en otoño
– Hidratación: el otoño trae una disminución en la humedad del aire, capaz de secar la piel. Por eso, necesitas una crema hidratante adecuada que contrarreste este efecto. Usa cremas que tengan ácido hialurónico y glicerina, aplicándola dos veces al día por la mañana y por la noche. Diferencia aquella destinada a la cara y la del cuerpo, ya que son muy diferentes.
– Exfoliación: el cambio de estación puede suponer tener una piel más opaca y con acumulación de células muertas. Antes de la hidratación, es recomendable llevar a cabo una suave exfoliación. De esta manera eliminaremos las impurezas y promoveremos la renovación celular. Úsalo al menos una vez por semana, tanto en el cuerpo como en el rostro.
– Fotoprotección: hemos repetimos en innumerables ocasiones que la protección solar no solo es para el verano. Emplea fotoprotectores solares durante todo el año con uno específico para tu rutina facial. Es la mejor forma para proteger tu piel de la radiación UV al mismo tiempo que evitas el envejecimiento prematuro con arrugas, manchas o pérdida de firmeza.
– Labios: cuidar la piel en otoño es fijarse en las partes más castigadas por el frío y el viento. Una de ellas son los labios ya que tienen una piel mucho más fina y están siempre expuestos a las inclemencias del tiempo. Para ello, hazte con un buen bálsamo labial para mantener tus labios hidratados y libres de grietas. Puedes llevarlo a todas partes y usarlo tantas veces como creas necesario.
– Manos: lo mismo que con los labios, ocurre con tus manos. Son de las partes del cuerpo más expuestas y no solo al frío y el viento, también a todo tipo de contaminación. Si quieres mantener la piel sana y cuidada, tendrás que llevar contigo una crema de manos específica. Hay muchas opciones donde elegir para que tus manos nunca estén secas o estropeadas.