Todos en algún momento de nuestra vida hemos tenido, tenemos y tendremos dolor de espalda. Es cierto que la intensidad del dolor varía mucho entre una persona u otra, lo mismo ocurre con el tiempo ya que puede ser algo puntual o sufrirlo de manera prolongada en el tiempo. Cuando se tiene dolor en esa zona del cuerpo acabará repercutiendo en nuestra calidad de vida. Descansaremos peor por la noche lo que provocará que estemos cansados e irritados. Nuestro nivel de estrés aumentará por el dolor y encima nos afectará a nuestra concentración y bienestar.
Hay trabajos que afectan más a la salud de la espalda como puede ser los obreros, los repartidores o los que trabajan en fábricas. Esto se debe porque deben cargar peso diariamente y por la postura en la que deben trabajar. Del mismo modo, los trabajos de oficina pueden provocar dolor de espalda e incluso pueden empeorarlo. En este caso, no es bueno pasar tantas horas sentados.
Aunque el dolor de espalda no se puede prevenir, sí que es cierto que podemos tomar una serie de medidas para reducir el impacto al que está sometida la columna vertebral diariamente. Desde Farmacia Dalí os damos unas pautas para cuidar de la salud de vuestra espalda.
Consejos para cuidar de la espalda
- Realiza deporte. El sedentarismo es un de las principales causas del dolor de espalda. Por tanto, practica deporte de forma regular. Por ejemplo, el yoga y el pilates son muy buenos para mantener la espalda sana. Eso sí, practícalos bajo supervisión. Son ideales para fortalecer la musculatura, para estirar y para adquirir unos buenos hábitos posturales.
- Muévete en la oficina. Los trabajos de oficina requieren permanecer la totalidad de la jornada laboral sentados en una silla frente a la pantalla del ordenador. Pasar ocho horas sentados sin levantarse tendrá consecuencias nocivas tanto para la espalda como para la vista. Por tanto, levántate cada veinte minutos y muévete un poco.
- Usa una buena silla de trabajo. Evidentemente si trabajas en una oficina no podrás elegir la silla con la que trabajar. En cambio, si trabajas en casa, deberás comprar una silla con un diseño ergonómico para mantener tu espalda recta y bien apoyada la zona lumbar.
- Cuida la postura. En primer lugar, la posición correcta cuando estamos sentados es tener los brazos a la altura de la mesa y los pies deben estar en el suelo. Si no llegas, usa un reposapiés. En segundo lugar, cuida tu postura a la hora de caminar y al estar quieto. La espalda debe estar recta, los hombros en perpendicular y la tripa hacia dentro.
- Tacones. Los zapatos de tacón se deben usar con moderación, sobre todo si usas un tacón fino y muy alto. No solo modificará la postura del pie, sino la de todo el cuerpo. Esto se debe porque desplazarás todo el peso hacia delante. Lo mejor son los zapatos que tienen un poquito de tacón y este debe ser ancho.
- Mantén una vida tranquila. El estrés, la ansiedad o el cansancio, entre otras emociones, harán que tu cuerpo esté en tensión lo que se transformará en dolor.