Es posible que, durante el verano, te esté costando conciliar el suelo. Las temperaturas nocturnas tan altas pueden afectarte a la hora de irte a la cama. No solo conciliar el sueño, también nos despertamos con más frecuencia durante la noche. Las consecuencias es que por la mañana nos encontremos agotados y con la sensación de no haber descansado.

El sueño es una función de nuestro cuerpo realmente vital. Nos permite recuperar nuestra energía, así como el equilibrio físico y mental. Necesitamos descansar bien para afrontar el nuevo día y las altas temperaturas nos lo ponen difícil. Las olas de calor hacen que la calidad del sueño se vea afectado.

La temperatura perfecta para dormir es entre los 18 y 22 grados, cuando esa temperatura supera los valores tenemos un problema. Y desde hace semanas que no bajamos de los 25-28 grados cada noche. Desde Farmacia Dalí te damos unas claves para descansar por la noche a pesar de las altas temperaturas nocturnas que tenemos cada día. ¡Apunta!

Claves para dormir mejor con temperaturas nocturnas altas

– Ambiente: uno de los primeros consejos es tener un buen ambiente. Eso significa mantener una temperatura fresca y agradable en el dormitorio. Puedes hacerlo usando ventiladores, aire acondicionado o sistemas de refrigeración alternativos. Emplea cortinas opacas o persiana par evitar el sol directo que elevará la temperatura. Ventila la habitación todos los días para renovar el aire.

– Pijama: a la hora de irte a dormir, tienes que elegir una pijama y ropa de cama adecuada. Lo ideal es algo ligero, holgado y transpirable. El mejor tejido es el algodón y el lino para estas noches de verano. Sin embargo, otra opción es la ausencia de ropa para estar más fresquitos.

– Hidratación: a lo largo del día debes llevar a cabo una buena hidratación, especialmente si hacemos ejercicio. Te recomendamos llevar siempre una botella de agua a cualquier parte y también a la cama. De esta manera, calmaremos nuestra sed durante la noche si es necesario. Evita las bebidas con cafeína, el alcohol o el azúcar antes de acostarte ya que alteraran tu sueño.

– Cenas: antes de irte a dormir se recomienda una cena ligera y temprana. Así, dejaremos las dos horas recomendables para hacer la digestión antes de acostarnos. Evita las comidas copiosas, picantes o grasas que puedan dificultar la digestión.

– Ducha: otra opción para dormir mejor con temperaturas nocturnas altas es darnos una ducha antes de acostarnos. Una forma ideal para bajar la temperatura corporal y relajar los músculos. Seguro que, de esta manera, coges el sueño más rápido y consigues descansar para recargar la energía.