Muchas veces descuidamos algunas partes del cuerpo porque creemos que nunca les va a pasar nada. Y no es así, en especial en la boca. La gingivitis es una enfermedad de las encías que se caracteriza sobre todo por la inflamación de la encía alrededor de los dientes.

Por lo general está causada por la acumulación de placa bacteriana. Se forma cuando las partículas de alimentos y la saliva se combinan con las bacterias en la boca. Si no se elimina a través del cepillado y del hilo dental, puede irritar las encías y provocar la inflamación. Hay otras causas posibles también como puede ser el tabaquismo, el estrés, la mala alimentación, ciertos medicamentos y cambios hormonales.

Entre sus síntomas destacan las encías inflamadas, sensibles y propensas a sangrar. Sobre todo, durante le cepillado o con el uso del hilo dental. El mal aliento también es un signo de que tienes gingivitis. Para que no tengas este tipo de problema, desde Farmacia Dalí queremos darte unas claves para evitar o prevenir la gingivitis.

Claves para evitar que tu boca sufra gingivitis

– Higiene bucal: el primer paso no es otro que mantener una buena higiene bucal. Debes cepillarte al menos 3 veces al día después de las grandes comidas. Pero también pasa el hilo dental ya que elimina la placa y los restos de alimentos que han podido quedar entre los dientes. No está demás que también quieras emplear un colutorio en enjuague bucal para reducir la acumulación de bacterias.

– Dieta equilibrada: llevar una buena alimentación también contribuye a la salud de tu boca. Intenta que sea rica en frutas y verduras, evitando el consumo de azúcar. Con una dieta equilibrada te asegurarás de mantener la gingivitis a raya.

– Intentar evitar: al margen de la alimentación, hay otros elementos que también pueden afectar a la salud de tu boca. Primero el tabaco que tendrás que eliminar o reducir en la medida de lo posible; y, en segundo lugar, el estrés que son medidas clave si quieres reducir el riesgo de la gingivitis.

– Visitar al dentista: una recomendación contra este problema y cualquier que pueda surgir, es tener visitas regulares con el dentista. Los profesionales se encargarán de identificar los signos tempranos de enfermedades y proporcionarán los tratamientos adecuados para prevenir que vuelva a ocurrir.