alimentación integral

Nos encontramos en plena época de dietas, lo que significa que vigilamos lo qué comemos y lo qué no debemos incluir en nuestra alimentación para bajar esos kilos de más. Uno de los alimentos que enseguida asociamos al control del peso es la alimentación integral. Sin embargo, la alimentación integral va más allá del control del peso debido a que contienen propiedades y cualidades que sus versiones refinadas han perdido.

La alimentación integral se puede definir como una dieta saludable, completa y rica en fibra. Por tanto, aportará beneficios a nuestro organismo como, por ejemplo, contribuye a mejorar el tránsito intestinal o al mantenimiento del colesterol. En definitiva, podemos decir que los alimentos integrales son aquellos que están elaborados por tres partes del grano del cereal, es decir, el salvado, el endospermo y el germen. Asimismo, se caracteriza por ser un cereal más oscuro y áspero al tacto (se debe a la presencia del salvado).

Dicho esto, desde Farmacia Dalí queremos explicarte qué beneficios tiene la alimentación integral en nuestra dieta y por qué deberíamos comer más alimentos “enteros”.

Beneficios de la alimentación integral

  • Saciantes. Proporciona una sensación de saciedad por lo que ayudará a evitar la ingesta de otros alimentos con más calorías. Gracias a ello, se recomienda su consumo en dietas de adelgazamiento, pero siempre con moderación ya que aportan la misma cantidad de energía que los alimentos refinados.
  • Combaten el estreñimiento. Mejora el tránsito intestinal por lo que contribuye a prevenir el estreñimiento. El arroz integral es un gran aliado en casos de estreñimiento gracias a que posee el salvado externo.
  • Salud cardiovascular. Reduce los niveles de colesterol malo y, por tanto, reduce el riesgo de tener enfermedades cardíacas. Por otro lado, los alimentos integrales son ideales para las personas diabéticas ya que al consumirlos no provocarán picos elevados de glucosa en sangre.
  • Contra el envejecimiento. Los alimentos integrales son ricos en antioxidantes, lo que significa que su consumo regular contribuye a frenar los primeros signos del paso del tiempo como las arrugas o la flacidez.
  • Diabetes. Uno de los efectos de la fibra es que evita grandes oscilaciones de azúcar en sangre, por lo que contribuye a controlar la diabetes.
  • Fortalece el sistema inmune. La flora bacteriana intestinal utiliza la fibra de estos alimentos para su desarrollo y crecimiento. Esta microflora es esencial ya que actúa como barrera defensiva frente a los agentes externos peligrosos para nuestro organismo.

Vistos los beneficios que nos aporta la alimentación integral ¿te animas a incluirla en tu dieta, aunque no estén en plan de adelgazamiento?